Mercedes SL 500 ha conseguido mejorar respecto a su antecesor en todos los sentidos. El motor ha ganado en potencia y ha mejorado considerablemente en la forma que la entrega. Tiene mucho más par y lo entrega antes.
Si a esto unimos que pesa 125 kilos menos y que eso se traduce en la sensación de agilidad que antes echábamos en falta, podemos estar hablando sin duda de uno de los mejores roadsters de su segmento